Hasta que...

Año: 2015.
Estado: en planeación.
Personajes: Riz, Zel y Patrei.

—¿Por qué tuvo que hacerlo de esa forma? ¿Por qué por estos tres años siguió aparentando algo que ya no sentía ni buscaba volver a sentir? ¿Por qué me mintió diciéndome que no quería dejarme a pesar de todo lo que teníamos en contra? Es injusto... es doloroso saber que siguió mi mentira sin desearlo para después huir de esta forma y, aun así, lo amo... —su llanto me hizo preguntarme hasta qué grado había sido beneficioso mi acto, yo lo había ayudado a él a costa de la felicidad de ella. Muchas veces ya había visto a personas sufrir por pérdidas o despedidas pero de alguna forma había roto la cuarta ley de los Relvyan "nunca entiendas a quienes registras"; por ello era que su dolor se convirtió en mi dolor.
—Él siempre deseó volver a sentirlo, deseó con demasiada fuerza reencontrar lo perdido, tanto lo deseó que el resto dejó de tener significado para él, tanto le dolió no poder amarte de nuevo que prefirió abandonar su vida completa para que tú encontraras a alguien más y tu vida no siguiera arruinada por él —me dejé caer de rodillas a su lado para poder abrazarla sin detenerme a pensar si era lo correcto en ese momento, entendía los sentimientos de ambos, entendía sus errores y sus razones, sin embargo no podía entender si yo había cometido un error o no—. Fue un cobarde, fue un estúpido pero debes intentar comprender por qué lo hizo, de una forma u otra, él se habría ido a donde nunca pudieras encontrarlo.

Zel y Riz, los cuales no son sus verdaderos nombres, viven en donde las parejas homosexuales es la forma tradicional, común y dominante mientras que la heterosexual es la reprobable. Sus destinos se entrelazaron desde muy chicos, sin embargo tener una relación fuera de lo normal fue una carga mucho mayor que la que uno de ellos pudo soportar, llevándolo a tomar una decisión que lo alejaría para siempre de la persona que alguna vez amó.


A finales del 2014, dándole fin a algunas de mis historias viejas y nuevas, decidí que debía escribir algo a lo que no estuviera acostumbrada ni que me agradara demasiado: romance. Sólo para ayudarme un poco con la frustración de lo que el reto significaba, decidí que fuera un romance-drama así que si algún día la leen ya les he avisado que no quedarán juntos (al menos eso me está pareciendo hasta el momento).

Tuve muchos problemas con la planteación de esta, primero creí que no quería una pareja común y corriente de hombre-mujer, pero hombre-hombre ya he escrito "bastante" y de mujer-mujer, muy poco, aún así mis pensamientos no pudieron asentarse en eso. El 2015 llegó y la idea seguía vaga en mi mente hasta que mi hermano, hablándome de cosas que le gustaría escribir, me hizo recordar que nunca había usado el tipo de narrador omnisciente, un personaje contaría la historia de otros desde su punto de vista. A esto le siguió el deseo de escribir un mundo amoroso contrario al nuestro.

Mi historia fue tomando forma hasta que un día escribí el prólogo para pegar todas esas piezas que tenía en mi cabeza (el prólogo se lo dejaré en unos días). Zel y Riz nacieron junto a Patrei, aunque este tardó en obtener su nombre apesar de ser mi querido narrador.

Tengo el espacio donde escribiré esta historia desde hace tiempo, he deseado ponerla en físico desde que la idea se terminó de formar, no obstante tengo demasiados proyectos. me vi obligado a volver a dejarla de lado aunque poco a poco llegan a mí ideas que les daré pues no son tan "spoiler": la primera es que, tanto Riz como Zel, tendrán un/a amigo/a transexual, la segunda es que usaré una que otra experiencia propia en esta historia.

Siento que, si algún día comienzo y finalizo esta historia, querré volverla algo más grande que un borrador, así que igual sea otra de mis propuestas a publicación si deseo seguir soñando con eso.


Permítanme hablarles un poco de mi trío. Riz es una chica tímida, ávida lectora y una romántica; esa timidez, junto a un tanto de inseguirdad, es un factor importante en la historia, pero cuenten con ella también como alguien amable y cariñosa cuando encuentra en quien confiar. Zel es igual de tímido aunque lo expresa mostrándose frío y distante, también es un ávido lector y un estudiante promedio porque ya no le nace seguir esforzándose por la excelencia; sabe ser romántico y alegre si aprende a confiar. Patrei, de una vez les aviso, no es del mismo mundo que ellos y, como espero hayan notado, es un Relvyan (ojalá recuerden lo que eso significa); él es muy alegre, positivo y amigable.

Con esto me despido, pues no debería estar aquí (tengo examen...) pero antes que la escuela siempre está la escritura (¡ojalá!). Nos leemos luego~

Semilla

Año aproximado: 2012, 2015.
Estado: en proceso.
Personajes: Collin, Garem y Khuram.

"Son libres de especular lo que deseen, de creer lo que les convenga y de cerrar sus ojos a la realidad; si de verdad creen que yo los he influenciado de esa forma, entonces desde hoy me retiro como su tutor asegurándoles que la próxima vez que cruce palabras con ellos será cuando las sospechas se hayan eliminado de ustedes."

Los Relvyan son una especie peculiar capaz de cambiar su apariencia en cuanto a edad, género y características; es por ello que son considerados como inmortales. Su principal labor es documentar los acontecimientos más sobresalientes de cuantos mundos puedan visitar. Sus números decrecieron peligrosamente hace muchos años, por lo cual se le otorgó una labor especial a algunos de los Relvyan más antiguos la cual consistía en reclutar niños aptos para unirse a su gente, enseñándoles y pasándoles parte de sus habilidades. De esa forma Collin salvó y educó a Garem y a Khuram.


Toda esta historia tiene un proceso creativo intrincado, largo y cambiante así que comenzaré con la forma en que más o menos recuerdo que esto sucedió. Lo más importante es que esta será la historia que he decidido hacer para traerla semanalmente por aquí, espero les agrade.


El primero en nacer de estos personajes e historia fue Khuram. En un sueño vi a un chico de mirada fría y presencia agresiva el cual era temido, aún así el chico vivía a un lado de las vías del subterráneo junto a otros chicos, lo suficientemente valientes, como para aceptar a Khuram como su guía y líder en lo que se refería robar para sobrevivir. En ese sueño él no tenía nombre, igual que sus compañeros. También sucedía que había un chico, siempre a las afueras del subterráneo, que le gritaba asesino a Khuram aunque todo siempre fue parte de un malentendido donde el joven Khuram se encontró en el lugar correcto en el momento equivocado. (Y no, no me equivoqué).

Fue el gusto por ese sueño lo que me llevó a desarrollarle una pequeña historia a ese líder y su grupo, sólo fue una aventura de su lucha para sobrevivir. Aún así olvidé gran parte de esa parte, recuerdo sólo fragmentos pero no motivos. Dejé a Khuram, no volví a revivirlo en mis memorias por un largo tiempo, o al menos no completo.

El siguiente en nacer fue Collin. Tenía la idea de hacer una historia donde un adulto salvara niños de vidas miserables (realmente miserables, más allá de la pobreza) y que les enseñara a usar magia. Empecé con un muy corto fragmento que escribí en mi libreta de planeación, en esa tenía como 20 niños de entre 7 y 12 años que había salvado antes de que siquiera conocieran el significado de la palabra 'sufrimiento' así que crecieron felices y agradecidos, sin embargo los últimos en ser rescatados fueron una niña y un niño de 13 años que ya temían el significado de esa palabra, aún así decidió hacer lo posible por regresarles un poco de paz si los otros chicos terminaban de aceptarlos.

Ese fragmento ahí terminó. Collin me agradaba como personaje y su destino, por eso fue la base para uno de los personajes de la historia de Plia y Hye, justamente el hechicero que les enseña a manejar la magia. No volví a pensar en él.

Y así llegamos al presente. Reviví primero a Khuram decidiendo que la próxima historia que escribiría sería para él porque era un personaje que me interesaba por su frialdad; primero regresé las viejas memorias y pensé en reintentar la historia que ya le había dado pero la falta de datos me llevó a descartarla. Después regresé una idea que me dieron sobre grupos sanguíneos, la junté con otro sueño sobre colores de piel, enredé mi mente y forcé mi imaginación hasta que las piezas del rompecabezas fueron quedando juntas. Antes de que todo quedara como el cuadro perfecto nació Garem, sería mi narradora pero decidí darle una mejor participación y un par de hombres que buscar.


La comunicación con Collin se ha perdido cuando este debería estar buscando nuevos candidatos para Relvyan, por ello enviaron a Khuram qu,e al ser uno de sus aprendices, debería ser capaz de llegar a él y traerlo de vuelta o regresarle la comunicación con el resto de los Relvyan, sin embargo eso sólo llevó a la desaparición del chico. Sin importarle las prohibiciones y órdenes, Garem dejó el Hogar de los Relvyan para buscar a su tutor y compañero, no porque fueran su única familia, sino por poder desafiar a los Cuatro Líderes y saciar su curiosidad sobre las acciones de los otros dos. Esa búsqueda la llevó a un mundo dividido en dos continentes donde en uno la gente se ha dividido y encerrado por grupos sanguíneos y otro donde la población fue separada según el color de su piel. ¿Dónde entra su maestro y su compañero? Eso es lo que entretendrá a Garem.


En la imagen primero vemos a Khuram en el último dibujo grupal que hice para presentar estos personajes. En la siguiente vemos el momento en que Collin presentó a sus dos últimos aprendices: Garem y Khuram; les parecerá que Garem está de loca enamorada con su compañero pero eso es lo que quiere que crean.

Collin, obviamente, es maduro; es serio pero amable y muy paternal, es muy astuto y era respetable hasta que los problemas comenzaron, aunque a los Cuatro Líderes nunca les haya gustado la forma en que seleccionaba a sus aprendices. Garem es una mentirosa compulsiva, le gusta aparentar algo que no es aunque nunca lo hace para que la gente se le acerque, ya que cuando nota que eso está pasando los insulta para que se alejen de ella o los asusta ya que es una de las Relvyan más poderosas junto a su compañero. Khuram, como ya les he dicho, da miedo sin que tenga que hacer nada, es demasiado callado y nadie sabe lo que está pensando.

Espero haber levantado un poco de su curiosidad pero lo que más espero es poder seguir escribiendo esa historia a tiempo ya que sólo llevo dos capítulos y el inicio de la tercera... muchas distracciones incluida la escuela... en fin. Nos leemos la próxima semana~

Camino

Año aproximado: 2011.
Estado: en planeación.
Personajes: Nari, Astoku e Imteri.

Aquél era el camino de los tres, ahí donde habían decidido encontrarse cada tarde o noche cuando sus obligaciones hubieran terminado. Nadie habría imaginado que niños tan diferentes hubieran formado una amistad tan fuerte por más de quince años y nadie habría creído que esa amistad terminaría con una desgracia así. El campo hoy estaba volviendo a la vida, recobrando poco a poco ese verde y amarillo que llegó a caracterizarlo, la paz parecía volver a su alrededor dejando el sufrimiento como una vieja cicatriz en la historia junto al anhelo de las tres risas que antes lo habían llenado.

Lejos de ese campo, de ese camino, los tres se habían visto obligados a tomar caminos separados pues de esa forma los requerían en la guerra; aún así su destino no les permitió separarse por completo. Las batallas pudieron haber sido duras pero más lo fue el desenlace de su corta historia donde el primer disparo le quitó el aliento al maduro, el segundo disparo ayudó al suicidio del orgulloso y el tercer disparo llevó a la reunión del alegre con los que amaba.

En esta única ocasión les contaré casi toda la historia, incluyendo el final pues es lo más representativo de este relato además de que fue lo que lo inició.

Alrededor de ese campo vivían los tres amigos de sólo siete años. Nari era quien vivía más cerca pues la mansión de su familia, localizada al noroeste, era dueña de la mitad de ese terreno aunque no lo usara; Imteri no vivía tan lejos, eran sólo quince minutos de caminata desde su casa en la pequeña villa al este; Astoku era quien más lejos vivía pues debía caminar poco más de treinta minutos desde su pequeña choza al sur del campo.

Uno era rico, uno tenía lo suficiente necesario y uno era pobre. Aún así se conocieron y establecieron un lazo aparentemente irrompible. Cada tarde, al final de las clases privadas de Nari, la escuela común de Imteri y el trabajo de Astoku, los tres se reunían para olvidarse de su realidad y sumirse en juegos y pláticas que los entretenían por horas hasta que fuera el regreso a sus casas. Por diez años así fueron sus días hasta que la guerra fue creciendo igual que la distancia entre ellos.

A sus diecisiete años su tranquilidad se terminó, primero Astoku se despidió al ser enviado a los campos de entrenamiento militar, después Nari tuvo que irse con su familia a otro estado buscando conservar su fortuna; y al encontrarse solo, Imteri se decidió por irse a la ciudad más cercana a especializar sus estudios. Así fue como, en cinco años se formaron: un soldado, un comandante y un médico.

Su reunión se dio en el campo de batalla con los tres en bandos diferentes: el pobre con los revolucionarios, el medio con los médicos independientes y el rico con los que buscaban mantener en el poder a los mismos. Con dolor siguieron peleando, los dos militares se deshicieron de sus sentimientos y recuerdos para concentrarse en sus nuevas obligaciones donde Nari dirigía tropas y Astoku se convertía en el soldado valioso de su equipo.

Y así el final llegó. El bando de Nari capturó a Astoku y algunos de sus compañeros, en respuesta el comandante le disparó a cada uno de ellos sin parpadear ni inmutarse por su viejo amigo. Imteri presenció el momento, con lágrimas y gritos trató de detenerlo mas le fue inútil, el dolor lo invadió por completo al ver al primero caer a manos de su propio amigo.

Nari siguió con sus labores hasta en la noche donde se encontró con Imteri, le reclamó, le pidió explicaciones pero este se mantuvo frío y callado hasta que se dirigió a su tienda con sólo un: "no lo dejaré solo". A la mañana siguiente el comandante se había suicidado.

Nuevamente destrozado y abandonado, Imteri sufrió, se aisló y huyó. Yéndose a la batalla más cercana, caminó inexpresivamente entre las balas hasta que estas terminaron con su sufrimiento.


De esta forma termina esta historia de mi trío tragedia. Todo comenzó con un sueño de tres amigos donde uno mata a otro, ese uno se suicida y el tercero se deja matar. Recuerdo claramente la escena final de ese sueño con los cuerpos tendidos y fríos de los tres, sobra decir lo mucho que me hizo sentir ese sueño, razón por la que le di continuidad y terminé en mi mente, sin embargo la olvidé.

Me olvidé del sueño, de estos tres chicos y su existencia completa por cerca de 4 años hasta que comencé a recordar cierta historia de tres amigos muertos. Leyendo Mi Historia me di cuenta de que ya había conocido a estos tres chicos, ya les había dado nombre y ya me había disculpado con ellos aunque no terminaba de recordar completa su historia. Después los encontré en mis notas de planeación, ahí estaban sus nombres, el cómo habían perecido y de qué era su historia.

Haberlos olvidado ha sido la peor de mis acciones, estoy completamente arrepentida de ello y estoy más que decepcionado por los datos que ya he olvidado de ellos, sin embargo nuevas cosas llegaron a mí para llenar esos huecos y no darlos por perdidos, sólo me falta tiempo para poder darles la forma escrita y física que merecen. Nos leemos luego~

Ninguna entrada me había dolido escribir hasta esta.

Escape

Año aproximado: 2011.
Estado: completa con reservas.
Personajes: Cio y Tex.

"—No. Por favor, Tex, no te hagas esto... no me hagas esto —lo atrajo hacia sí y lo abrazó con fuerza mientras pronunciaba las palabras temiendo que su amigo no les respondiera nunca más. El peso de la culpa lo atormentó mucho más que antes, no había soportado la forma en que el resto se había referido a su amigo y ahora le lastimaba ver el estado que el trato de ellos había provocado en Tex. Con dolor deseaba nunca haberse encontrado con él, nunca haberlo involucrado en algo de lo que nunca debió haber huido— . Lo siento tanto."

Nacido en un pequeño grupo de gente dedicada a la protección del mundo contra invasores provenientes de otras dimensiones, Cio decidió huir para vivir una vida normal y sin peleas ni secretos con las demás personas. Por cinco años compartió hogar y experiencias con Tex hasta que su gente decidió llamarlo de vuelta, involucrando así a su amigo en algo más allá de su imaginación.


El diálogo que cité ha sido uno que he cambiado el número de veces que he recreado esa escena aunque nunca ha dejado de ser "dramática" después de tantas veces. Y bueno, esta historia tuvo la misma mala suerte que la anterior pues es de las que he escrito únicamente en mi mente, de principio a fin, sin volverse física. Es algo corta, pero considero que vale la pena escribirla porque me ha ayudado tanto como repasar los momentos de Plia y Hye.

La supuesta sinopsis no me salió tan bien (ni la cita de hecho) pero en general es eso, que también me hizo pensar que esta historia fue la idea madre de Dimensiones... En fin, la familia y gente de Cio no es muy amable con el resto de las personas y se aferran mucho a sus tradiciones, cuando lo mandaron a llamar Tex estaba ahí así que como los vio, lo obligaron a ir a donde Cio iría a recibir su castigo por la huida y a cumplir el destino por el que había nacido.

Cio fue el único hijo del líder de esa aldea y, como tal, debería haber heredado los derechos de su padre, sin embargo este lo desconoció cuando lo hicieron regresar. La razón de traerlo de vuelta era para que tomara su lugar en la pelea entre aldeas donde cada pueblo mandaba a competir un grupo de sus jóvenes más habilidosos contra los demás resguardando un Tesoro que debían llevar a un Templo mientras el resto de los equipos tratarían de arrebartárselos para ser quienes lo llevaran.

El Tesoro siempre lo llevará al inicio el equipo que provenga de la aldea que haya ganado la competencia anterior, las cuales se realizan cada 16 años. Lo que hace vistosa la competencia es el recorrido de los equipos pues entre ellos pelean usando las habilidades que tienen por parte de su aldea, todo sin dejar de recorrer el camino de 16 días hacia el templo. En cada competencia el Tesoro es diferente y para la competencia, en la que Cio es forzado a participar, fue excepcional.

El castigo impuesto a Cio no solamente fue físico, también lo obligaron a pagar su falta y cobardía uniendo a Tex a la competencia como el Tesoro aún en contra de las protestas y rabietas de su amigo. La situación empeoró con cada noticia que le daban a ambos pues el líder del equipo de esa aldea sería el segundo más fuerte entre lo jóvenes, un chico que ya odiaba a Cio por ser el más fuerte y que lo detestó aún más cuando huyó.

Con ambos encadenados al equipo, su carrera comenzó. Muchos problemas tuvieron, entre ellos el que el equipo de Cio rebajara a Tex a un simple objeto y no una persona, lo que al inicio soportó por su amigo.


Creo que expliqué demás... Como sea, el final de esta historia cambió dos veces pues la primera vez me ayudó a comenzar la creación de mis ocho cirqueros de Gemshojiru, aunque en ese momento sólo eran 7. De verdad deseo escribir esta historia porque siempre me ha gustado el sentido que tenía aunque los años me han hecho olvidar ciertas cosas como lo eran las habilidades de cada grupo...

Eso es todo por hoy, ojalá les haya interesado la historia. ¡Antes! Casi olvido algo tan importante... El nombre de Cio significa 1 (uno) y el de Tex 2 (dos) porque desde que los creé no les di nombre, simplemente los llamaba uno y dos, por eso les traduje sus nombre a mi idioma... tal vez suene un tanto grosero pero es algo que nunca pude olvidar de ellos. Ahora sí, nos leemos luego~

De nuevo el título está sujeto a cambios.